Hinchas del Inter abandonaron al equipo y quisieron volver a entrar al estadio
El equipo de seguridad del estadio San Siro no les permitió el reingreso a los hinchas, luego de que escucharan el emocionante empate.
Noticias RCN
06:46 p. m.
Lo que parecía una noche amarga en San Siro terminó convirtiéndose en una muestra de fe para muchos… pero también en una lección para otros.
Durante los minutos finales de la semifinal de vuelta de la UEFA Champions League entre el Inter de Milán y el FC Barcelona, decenas de aficionados locales comenzaron a abandonar el estadio tras el tercer gol del conjunto catalán, que colocaba el marcador 3-2 a su favor. El gol parecía sentenciar la eliminatoria, y algunos hinchas, decepcionados, eligieron retirarse antes del pitazo final.
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Sin embargo, lo inesperado ocurrió: en el minuto 90+3, sco Acerbi anotó el empate agónico para el Inter, desatando la locura en las gradas y renovando la esperanza en todo el estadio. Pero aquellos que se habían ido antes del final se perdieron el gol y, aún peor, no pudieron regresar a sus asientos pese a mostrar sus boletos.
El protocolo de seguridad impidió el reingreso
Al notar el sorpresivo empate, muchos de los hinchas que ya estaban fuera del estadio intentaron volver a ingresar al recinto. Algunos llegaron corriendo a los s del San Siro, entrada en mano, pidiendo que se les permitiera regresar a ver los minutos finales y, eventualmente, el alargue del encuentro.
Sin embargo, el personal de seguridad fue inflexible y respetó el protocolo habitual: una vez que se abandona el estadio, no se permite reingresar, incluso si se cuenta con entrada válida.
Las imágenes de los fanáticos frustrados por no poder entrar nuevamente rápidamente se viralizaron en redes sociales. Muchos s criticaron la decisión de abandonar al equipo en un momento crucial y recordaron que el verdadero hincha acompaña en las buenas… y en las malas.
Una lección para los que se fueron antes del final
La escena se convirtió en una lección espontánea para todos los amantes del fútbol. Mientras adentro San Siro vibraba con el gol de Acerbi y los jugadores del Inter celebraban con euforia, afuera decenas de seguidores vivían una mezcla de arrepentimiento y frustración. Las críticas en redes sociales no tardaron en llegar, y cientos de comentarios coincidieron en una frase contundente: “al equipo nunca se lo abandona”.
El episodio dejó una reflexión clara: en el fútbol, como en la vida, todo puede cambiar en cuestión de segundos. Y a veces, los más fieles son quienes obtienen la recompensa de vivir los momentos inolvidables.
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