El mensaje que le dio el cardenal colombiano Luis José Rueda al papa León XIV
Monseñor Luis José Rueda reveló los encuentros que tuvo con el cardenal Prevost, especialmente el último almuerzo que compartió con el ahora papa.
Tras la elección de León XIV como nuevo papa, el cardenal colombiano, Monseñor Luis José Rueda, habló con el director de Noticias RCN, José Manuel Acevedo. Le reveló que compartió la mesa y el último almuerzo con el entonces cardenal Robert Prevost.
Aseguró que tiene mucha fe y esperanza con el nuevo líder de la iglesia católica.
¿Cómo salió del cónclave? ¿Qué sensación personal le queda?
La sensación del cónclave es que hemos vivido una experiencia de fe, una experiencia donde el Espíritu Santo actúa realmente. Es totalmente distinto a lo que se puede pensar por fuera, es una experiencia espiritual. La emoción de cada uno de nosotros y la reacción de todos los que en los distintos continentes se emocionan es porque el fuego del Espíritu conduce la Iglesia y conduce el corazón de cada persona.
¿Ya conocía al papa León XIV?
Tuve la oportunidad de conocerlo desde el año 2023, cuando vine al primer mes del sínodo. Estuvimos todo el mes de octubre trabajando, me correspondió en mesas con él. El cardenal Prevost fue hecho cardenal en el mismo consistorio en el cual el papa me creó a mi cardenal. Somos del consistorio del año 2023.
Luego, en el 2024, pudimos trabajar nuevamente en el sínodo. Él habla perfectamente el español porque trabajó mucho tiempo en el Perú, en Chiclayo, y por lo tanto la lengua nos unía para el trabajo. Después, hemos compartido, aquí ha sido una ocasión, incluso ahora, muy cercano a todo lo que hemos vivido, hemos tenido unos momentos de encuentro muy fraternos.
¿Cuál fue su encuentro más reciente?
El domingo pasado estábamos caminando con el cardenal Rubén Salazar en la Casa de los agustinos y él vino como hacia las 10:00 de la mañana con su secretario y venía en ropa deportiva porque venía a practicar el tenis.
Lo saludamos y le comenté al cardenal Rubén y saber que uno de los cardenales que hoy está jugando tenis puede estar de blanco el próximo domingo. Y lo compartimos como si hubiéramos encontrado a cualquier cardenal, pero sabiendo que él estaba en el corazón de la iglesia, estaba palpitando ya con su nombre.
Después, en el conclave, ha sido una vista muy grande porque ayer (jueves) tuvimos la oportunidad de almorzar en la misma mesa. Llegué tarde porque tenía que hacerme unos remedios por la gripa que tengo y cuando llegué ya todos los cardenales estaban almorzando sus mesas. Entonces, solamente vi una mesa libre, fui y me senté allí, y como a los dos minutos llegó el cardenal Prevost para almorzar y pudimos compartir juntos. Fue el último almuerzo de él como cardenal.
¿Qué imagen pueden llevarse los colombianos del nuevo Papa?
Hay que resaltar varias cosas. Primero, la centralidad en él, en su lenguaje y en su vida de Cristo Jesús, el Hijo de Dios, nacido de la Virgen María, el rostro del Padre. Segundo, un hombre misionero, un hombre de Jesucristo, en camino, con el pueblo de Dios, con los cinco continentes, capaz del servicio. Además, un hombre muy cercano, sencillo, humilde, lleno de sabiduría, lleno de Dios.
¿Cree que podría visitar pronto a Colombia?
Por ahora hay que dejar que llegue, se ubique y haga su programa, pero sería una alegría inmensa tenerlo en Colombia porque es un papa que conoce a Colombia, conoce el país, conoce Suramérica y para nosotros será una alegría poder tener nuevamente un papa.
¿Qué hacen después de que salen del cónclave?
Después de estar en la presentación en público ya del papa León XIV, nos invitaron a la cena con el Santo Padre. Estuvimos en la Casa Santa Marta todos los cardenales electores cenando con él. Cada uno le dice lo que quiere decirle.
Yo quise decirle siempre palabras que lo consolaran, que lo animaran, que sintiera que en Colombia y que la Iglesia de América Latina lo queremos ya mucho, ya lo sentimos como el Santo Padre, como el sucesor de Pedro, como el que el papa Francisco hubiera querido tener también como sucesor.
Le dije: sepa que el Señor Jesús resucitado, la Santísima Virgen María lo acompañan, nunca estará solo, no pierda nunca la alegría.
Es un norteamericano de Chicago que une el sur con el norte, que une América con Europa porque tiene origen también francés. Los padres, los abuelos de él, los Prevost de Francia. Por lo tanto, tiene la posibilidad de ser acogido en todo el mundo y nosotros queremos pedirles a todos los colombianos, a todas las familias orar por el Santo Padre. Le espera una misión maravillosa, pero él no la quiere realizar en soledad. Quiere estar con nosotros y quiere sentir el pueblo de Dios cercano.